
En la primera academia en la que estuve dure dos años, fue en la que agarre el gusto por el ballet y en la que decidí que quería meterme de lleno en el ballet y aunque no es algo de lo que me guste admitir en esa época yo me sentía lo mejor de lo mejor en el ballet, ya que era la mejor en mi clase de ballet . Entonces me cambie de academia (Me cambie de academia a una de mejor enseñanza y mas profesional) y PUM!! la realidad vino a mi, entre a una academia en la que yo era la peor, en la que no lograba aprenderme ningún ejercicio y menos aún que me saliera, en la que sus alumnas iban a nacionales y ganaban uno de los tres primeros lugares. Fue hay cuando me di cuenta que en la otra academia solo me habían enseñado el nombre de algunos pasos pero no su técnica y fue como si volviera a empezar; aprender a colocar bien los brazos (cosa que todavía no logro), cerrar las costillas, apuntar y apuntar hasta y que se te entuman los pies y no los sientas, apretar y meter gluteos, sostenerte en balanz, rotar, y todos los ejercicios que hagas te tienen que doler, si no duele no sirve. Poco a poco e ido mejorando ya llevo dos años en esa academia y son los años en que realmente siento que he estado entrenando ballet, por esa razón cundo me preguntan cuanto tiempo llevo bailando ballet digo: dos años en vez de cuatro.
Y aunque ya no bailo tan mal soy consiente que aunque no bailo mal tampoco bailo de maravilla y que en Rusia niñas de once años bailan mil veces mejor que yo. Como dice mi maestra: "Si el ballet fuera facíl cualquiera sería bailarin".
Foto: Miko Fogarty
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